PERSONAS SIN HOGAR
Las personas sin hogar no están en la calle porque quieren. Acumulan vivencias traumáticas encadenadas que les hacen perder su estabilidad emocional, sus recursos económicos y su red de apoyo. Nuestro sistema de protección social es insuficiente para la caída provocada por estas circunstancias.
Acabar en la calle es en sí una agresión que acarrea soledad, otras agresiones y formas de violencia, y una muerte prematura. Las personas sin hogar sólo se relacionan en igualdad con otras personas sin hogar. La mayor parte de su tiempo lo pasan solas. No pueden ejercer sus derechos. A menudo les resulta imposible empadronarse y conseguir su tarjeta sanitaria. Tampoco tienen intimidad ni propiedad privada, no tienen su seguridad garantizada… Los recursos sociales son insuficientes y no atienden sus necesidades.
¿Qué hacemos?
Grupos de voluntarios/as recorren las zonas donde habitualmente se encuentran las personas sin hogar. Compartir con ellas un café caliente es la excusa para conversar, vencer la soledad y establecer una relación de ‘igual a igual’.
También tenemos espacios de encuentro donde fomentamos la participación mediante actividades culturales. Un espacio seguro, donde relacionarse entre iguales y sentirse parte de una sociedad que los acoge.
El Voluntariado consigue…
La situación de las personas sin hogar
«El Puzzle»
Este video de Solidarios, realizado con CIPÓ Company, da visibilidad al sinhogarismo, cede la voz y el espacio a las personas sin hogar, denuncia la insuficiencia de los recursos públicos y reivindica que los ‘sin techo’ no están ahí porque quieren.
«Sin nuestra pieza, el puzzle no va a estar completo. La sociedad está hecha de unas cuantas piezas. Si yo compro un puzzle , cuando descubro que me falta una pieza, ese puzzle ya no me sirve. Ese puzzle debe completarse.”
EN PRIMERA PERSONA