• Sonia Barrar asume un reto deportivo en solitario: cruzar la península en bici de Gijón a Gibraltar en solo cinco días.
• Un reto donde recaudar fondos para el programa de Salud Mental de Solidarios.

Una de cada cuatro personas, el 25% de la población, sufre un trastorno mental a lo largo de su vida. Sin embargo no es un tema de conversación muy común y las personas que viven con la enfermedad mental tienen que luchar contra el estigma y procurar una integración que no siempre en fácil. Por este motivo, la asociación Think, Hike & Bike y su directora Sonia Barrar, han decidido dedicar este reto deportivo a concienciar sobre este problema y a colaborar con esta causa.

Sonia Barrar pedaleará en solitario desde Gijón a Gibraltar en cinco días. Su salida está prevista el domingo 13 de mayo y la llegada será el 17. España de punta a punta por una buena causa. 200 kilómetros diarios de media, de trece a quince horas sola encima de su bicicleta rodando por carretera. La ruta pasa por Benavente, Plasencia, Mérida y Sevilla y asumirá las subidas de puertos como Pajares, Béjar y el Parque Natural de Los Alcornocales, en nuestro país que de por sí es el segundo más montañoso de Europa.

Para recaudar fondos se utiliza el portal web www.migranodearena.org donde se pueden hacer los aportes para este reto a favor de la salud mental hasta el día 17 de mayo. Entre todas las personas que colaboren se sortearán unas gafas deportivas que Lens-Sport ha donado para contribuir a esta causa. Los avances de ruta se pueden seguir en redes sociales (Facebook e Instagram) y en la web gijongibraltar.cecweb.es

Para Sonia es un reto personal, “creo que puede ser muy inspirador, ya que soy una mujer cruzando la Península Ibérica en solitario y con fines benéficos. A la vez de concienciar sobre la salud mental quiero inspirar a otras personas a animarse a exigirse y romper barreras en la cabeza, quiero demostrar que no hay límites”.

Solidarios invertirá lo recaudado en el programa de actividades de ocio para personas diagnosticadas con enfermedad mental donde comparten su tiempo con el voluntariado en una relación entre iguales y recuperan autoestima y capacidades para afrontar las decisiones cotidianas de su vida.